A lo largo del último año hemos visto cómo ha habido un uso creciente de las tecnologías en todos los ámbitos de nuestra vida. Cada día experimentamos el dinamismo y la influencia de las tecnologías en nuestras rutinas diarias. La educación no ha quedado fuera de esto.

Debido al creciente uso de las tecnologías en la información también hemos podido evidenciar, una sobresaturación de información disponible en línea. Cada día se publican en internet millones de artículos, videos, clips de audio e historias en redes sociales sobre cualquier tema y no toda esa información viene de fuentes fiables o tiene relevancia.

En el ámbito de la enseñanza-aprendizaje, tanto los docentes, como los alumnos e incluso los padres y tutores que apoyan en su educación, deben ingeniárselas para filtrar y seleccionar información de fuentes fiables y construir un corpus para los procesos de enseñanza.

Por eso en este artículo queremos centrarnos en cómo los docentes, alumnos y padres acaban por ser, de manera intuitiva y si se quiere accidental, curadores de contenidos y de qué manera lo hacen. Así como también de qué manera pueden influir los temas a estudiar en los procesos de curación de contenidos para tal fin.

Consejos para seleccionar contenido de calidad

Los grupos mencionados anteriormente saben, por lo menos intuitivamente, cómo seleccionar o curar contenido de manera correcta. Pero a continuación exponemos algunas prácticas para que este proceso sea más efectivo. Ya seas docente, padre o alumno, estos consejos pueden ayudarte:

  • Si eres docente, considera hacer una plataforma donde puedas compartir con tus alumnos las fuentes de información en la red que consideres que pueden agregar valor. También esta plataforma puede ayudarte a generar un diálogo con tus alumnos y ellos también puedan compartir fuentes que consideren valiosas, así podrás conocer fuentes nuevas o en otros casos sugerir o no la utilización de las mismas.
  • Muchas veces podemos encontrar en la red información de fuentes muy fiables pero con un lenguaje bastante complejo. Aquí es cuando, como docente, podemos crear contenidos originales basándonos en estos datos encontrados y así hacerle la información mucho más digerible a nuestros alumnos.
  • Mantente actualizado. Si se trata de información científica o tecnológica, lo más probable es que tengas que mantenerte actualizado y tratar que los artículos que selecciones sean actuales.

Caso: Contenido para aprender inglés

Tomaremos como caso qué pasa si buscamos contenido para aprender inglés, desde la estructura gramatical hasta el vocabulario o la comprensión del idioma.

Los siguientes recursos son parte de los resultados en una búsqueda en la que busqué contenidos para guiar el aprendizaje de este idioma.

  • Empezar a familiarizarnos con la forma de escritura y sus significados. Para esto podemos darnos la oportunidad de empezar a consultar páginas en Inglés. Podemos empezar por guías para aprender los tiempos verbales sencillos, como el pasado simple. Este tipo de guías como la que acabo de mencionar de Tutorela ayudan a entender la manera que se estructuran las frases y comprobando su significado, podemos entender cada día más.
  • Sistemas para aprender palabras y sus significados. No serán las mismas, dependiendo de cada candidato, pues los puntos de interés varían, no sólo por los objetivos de aprendizaje del idioma, sino por cuestiones más generales como el grupo etario.
  • Escuchar podcasts en Inglés. Para un principiante, este método puede ser bastante agresivo, pero es efectivo en el tiempo, sobre todo si mientras escuchamos podemos leer lo que se dice. Hay variados programas de sellos  prestigiosos como los de la BBC.
  • Ver videos de Youtube en inglés con subtítulos en inglés. Aquí lo importante es ver videos con temáticas interesantes para quien aprende y que esa persona además conozca el tema que se está tratando por otros medios. Colocar los subtítulos en inglés hará que la experiencia del aprendizaje sea más inmersiva y efectiva.

Fuentes multimedias de información

Además de las fuentes bibliográficas y de texto virtual, existen otras fuentes que pueden facilitar el proceso de enseñanza-aprendizaje. Estamos hablando de las fuentes multimedia como los videos o audios, entre los que figuran como principales los videos alojados en YouTube o los podcasts de contenido educativo.

Estas fuentes, si tiene contenido verificado, pueden ser de mucha ayuda a la hora de ser herramientas alternativas a la enseñanza tradicional. Por ser novedosas y generalmente entretenidas, suelen ser muy efectivas a la hora de enseñar o hacer llegar un mensaje.

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