Este año el Día Internacional de la diversidad biológica llega en medio de una alarma internacional por el acelerado ritmo de desaparición de las especies. No es casualidad que el discurso de la joven sueca Greta Thunberg haya tenido tanta repercusión mediática.
La diversidad biológica es producto de la historia evolutiva e incluye, en sentido amplio, todos los ecosistemas caracterizados por la diversidad de vegetación y clima, la diversidad de especies e incluso la diversidad genética de cada especie.
Discursos como el de Thunberg denuncian un modo de vida que está amenazando ya no el futuro de nuestra civilización sino la propia vida en el planeta. Sin embargo esa “alarma internacional” no se está traduciendo en decisiones políticas para cumplir con las metas de Desarrollo Sostenible para 2030.
Saber que el impacto de la acción humana ha provocado la reducción, sólo en las últimas 4 décadas, de un 58% de la biodiversidad del planeta, debería ser suficiente para sentirnos responsables. Aunque no todos tengamos la misma capacidad y el mismo grado de responsabilidad, todos tenemos una porción de ella.
Puede que tú no puedas hacer todo lo que el planeta necesita para hacer frente a la pérdida de la diversidad biológica. Pero ¡el planeta sí necesita que tú hagas lo que puedas!
Por eso es tan decisivo el papel de la educación desde los primeros años. No sólo para sensibilizar a las generaciones futuras de modo que minimicen su impacto en el medio ambiente, sino también para que se preparen para una realidad que ya está aquí. 
¿Por qué es tan importante preservar la diversidad biológica? Tan sencillo como impactante: de ella depende la vida de todos los animales, incluida la tuya, desde el aire que respiras hasta el agua que bebes.
Romper el eslabón de las cadenas alimenticias significa desencadenar un efecto dominó en el que lógicamente nosotros también entramos. Antes de ello, también comporta otros fenómenos como la aparición de plagas o el aumento de CO2 con la pérdida de especies vegetales.
6 acciones para preservar la diversidad biológica
¡No te quedes sólo en el escenario apocalíptico! Todavía existen pequeñas acciones que puedes llevar a cabo y enseñar a hacer a niños y niñas. No sólo por el mayor o menor impacto que puedan tener, sino especialmente para educar en una actitud consciente.
Este año el Día Internacional de la diversidad biológica se centra en el papel de esta para la alimentación y la salud, y así llamar la atención sobre fenómenos como la desaparición de la biodiversidad agrícola y la pérdida de conocimiento sobre alimentos locales.
Sobre esa temática y algunas más, te damos algunos consejos fáciles para que puedas emprender acciones en casa con los más pequeños.
- Alimentarse con responsabilidad
Una acción muy educativa para los más pequeños es llevarlos de compras para reflexionar sobre el consumo de alimentos y las consecuencias que tienen. Ser selectivo con la comida o elegir frutas y verduras de producción local puede ser una gran lección.
- Jugar a reciclar
El juego suele ser el mejor camino para aprender cosas, y en este caso también. Mejor que “reciclar”, es “jugar a reciclar”, enseñando en casa a separar en cubos diferentes los residuos.
- Reducir el plástico
Mejor aún que jugar a reciclar es no producir tantos residuos contaminantes. Como ya sabes, los residuos plásticos se han convertido en una de las grandes amenazas a la diversidad biológica.
De hecho, como nos recuerda la divulgadora científica Sabrina Weiss en Exploradores del Océano, podemos hablar ya del océano como una gran sopa de plástico, donde el 2050 el plástico será más abundante que los peces.
Con objetivos a corto plazo, puedes utilizar alternativas al plástico en todos los objetos cotidianos, desde usar un cepillo de dientes de bambú hasta rellenar la misma botella con detergente a granel.
- Apagar la luz
Es fundamental inculcar pautas de comportamiento respecto al consumo energético en casa. Además de bombillas de bajo consumo, apagar las luces o los aparatos al no usarlos, y enseñar a hacer un uso mínimo de la climatización son medidas imprescindibles.
- Usar otros transportes
Si los niños se acostumbran desde pequeños a utilizar medios alternativos al automóvil será más fácil que de mayores también lo hagan, en la medida de sus posibilidades y especialmente en la ciudad.
- Conocer la diversidad biológica
Conocer y cuidar la mayoría de las veces sucede a la vez. Se quiere y se lucha por preservar aquello que se conoce mejor. Si quieres hacerlo con los más pequeños, es importante que sea de una manera atractiva y clara, con una visión pedagógica y sensible sobre el valor de la diversidad biológica.
Estas son algunas de nuestras propuestas:
Lo hemos mencionado al hablar de reducir el plástico. Con este enorme volumen no sólo descubrirás los secretos del océano, el mayor hábitat de la Tierra, sino que también aprenderás cuáles son sus grandes amenazas y qué puedes hacer para protegerlo.
Un atlas para emprender un viaje apasionante por los 5 continentes, aprendiendo todo sobre animales y ecosistemas, de la mano de hombres y mujeres que dedicaron su vida a proteger y estudiar la diversidad biológica, como Charles Darwin, Konrad Lorenz o Dian Fossey.
Además de estos pequeños consejos, puedes aprender más siguiendo las aportaciones de este día en las redes sociales con etiquetas como #DíaDeLaBiodiversidad o #BiodiversidadEsSalud.
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