La generación del 98 se caracteriza por la reacción al realismo de la etapa anterior. Pretenden renovar la literatura y hacer reaccionar a una sociedad apática y conformista. ¿Cómo lo consiguen?

  • El mundo interior de los personajes es el protagonista por encima de las descripciones externas. De hecho, el paisaje es un símbolo del estado del alma.
  • La narración es en primera persona con lo que personaje y narrador expresan sus ideas y sentimientos como una sola persona.
  • La estructura de la trama no siempre es coherente y la divagación forma parte de la obra.
  • En este sentido, los géneros se confunden. Las novelas tienden a diálogos teatrales y el teatro se llena de explicaciones narrativas.

Miguel de Unamuno

Elimina las fronteras en el autor y sus personajes, él mismo defiende que “toda novela, toda obra de ficción, todo poema, cuando es vivo es autobiográfico”.

En su novela Amor y pedagogía, además, experimentó nuevas posibilidades en la literatura, tanto que varios críticos lo acusaron de no escribir novelas. Él se defendió diciendo que escribía nivolas.

A través del personaje de Avito, un hombre cuya meta en la vida es hacer un genio, conocemos sus inquietudes y dudas existenciales.

Según este personaje (que es la voz del autor) un genio nace igual que los demás pero la educación marca el crecimiento de la persona.

Para exponer sus dudas e ideas se sirve, como decíamos, del diálogo con otro personaje, un filósofo amigo de don Avito llamado Fulgencio.

 

Ramón del Valle-Inclán

El autor pasó por diferentes etapas, pero dos términos caracterizan su obra en una de las más prolíficas: bohemia y esperpento.

Valle-Inclán es el creador de una nueva técnica literaria, el esperpento. Los personajes degradados, incluso grotescos, y la deformación sistemática de la sociedad hasta límites absurdos le sirven para criticar las injusticias y falta de libertades de la sociedad.

En Luces de Bohemia recrea un submundo degradado para hacer reaccionar a su protagonista, Max. Libreros estafadores, borrachos en las tabernas, frívolos escritores, calabozos, represiones policiales… que hacen descender al protagonista al abismo.

Exagerar los rasgos sirve para despertar sensibilidades y hacer reaccionar a una sociedad tan acostumbrada a la corrupción y a las desigualdades que las asume como normales.

La bohemia recoge el deseo de separarse de la sociedad establecida y rechaza los valores que impone la burguesía, con jóvenes que viven al margen de la sociedad y artistas que rompen con los cánones establecidos.

Valle-Inclán también denuncia el mundo de golfos, pícaros y maleantes que se aprovechan de la bohemia, por eso don Latino es un desaprensivo bohemio que tima al desesperado Max y el aviso que recoge el libro “Max, es preciso huir de la bohemia!”, podría ser del mismo Valle-Inclán.

 

Pío Baroja

El objetivo de Pío Baroja era reflejar la vida tal como es: heterogénea, compleja, desordenada… Y se sirve de unos personajes inconformistas, solitarios e incluso inadaptados.

En Zalacaín el Aventurero, el protagonista se enfrenta a Carlos Ohando que representa la sociedad rancia de la que los integrantes de la generación del 98 se quieren distanciar.

Zalacaín se ve envuelto en una vida de riesgos y aventuras: se convierte en contrabandista, es encarcelado, rapta a su novia… toda una serie de acciones temerarias que lo que esconden es un espíritu rebelde y luchador, con el que se identifica el mismo autor.

Sus personajes son de acción y pretenden salvar el mundo, pero ni lo consiguen ni calman su angustia anterior. En Zalacaín también está representado el desencanto y el vacío que sentía el propio Baroja.

 

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