¡Hoy es el Día de los Asteroides! “Pero bueno, es que hay día de todo?”, quizás pienses. No te precipites, porque es un día importante para el futuro del planeta y la educación de los más pequeños tiene un papel crucial.   

¿Por qué hoy? Fue un 30 de junio de 1908, cuando se estrelló en el río Tunguska, en Siberia, un asteroide de unos 37 metros de ancho, capaz de liberar la energía equivalente a 185 bombas como la lanzada en Hiroshima en 1945. Sin víctimas humanas, destruyó unos 80 millones de árboles.   

Lo primero y más importante, es no alarmar innecesariamente a los más pequeños. Desgraciadamente el sensacionalismo de algunos medios lo hace cuando publica titulares alarmando sobre los riesgos de impacto, en una probabilidad que de hecho, para las generaciones actuales, es cercana a 0.  

Eso no significa que no vaya a suceder, como de hecho ya ha sucedido, pero ninguno de los asteroides potencialmente peligrosos por tamaño puede chocar con nuestro planeta en los próximos cien años

De todas formas, existen iniciativas y programas de investigación avanzados sobre la trayectoria de los asteroides y la defensa contra una potencial amenaza desde hace años.  

Actualmente la NASA y la Agencia Espacial Europea trabajan de forma conjunta en la misión DART (dardo) que tiene 2022 como horizonte. Consiste en el desarrollo de un impactador cinético: chocar una nave espacial contra un asteroide para comprobar cómo se desvía su órbita. 

En ese sentido, necesitamos también observadores del cielo, astrónomos aficionados que aporten datos para poder determinar con precisión la órbita de estos objetos, y a partir de eso, predecir sus trayectorias y comportamientos.    

El Día de los asteroides, un día para aprender 

El Día de los asteroides es una oportunidad para acercar a los más pequeños a este ámbito del conocimiento tan fascinante, y enseñarle a hacer algo que hemos olvidado: mirar el cielo, una actividad repleta de lecciones.   

  • Curiosidad 

Tener curiosidad por el mundo que nos rodea es el impulso fundamental para madurar intelectualmente. Por otra parte, enseñar a mirar es algo cada vez más necesario frente a la exagerada cantidad de imágenes que desfilan por los ojos de los más pequeños.  

  • Autonomía

Muy vinculado a lo anterior, la astronomía es una puerta de entrada magnífica a la ciencia y al desarrollo del aprendizaje autónomo. Aprovechar la investigación sobre los asteroides para enseñar a mirar el cielo, a simple vista o con un primer telescopio, es un camino muy interesante para estimular su pensamiento.     

  • Protagonismo

Son muchos los grupos y asociaciones de observación astronómica que colaboran para aportar datos importantes en la vigilancia de asteroides. ¿Hay algo más emocionante que contribuir, como aficionados y desde pequeños, al desarrollo científico? 

  • Conciencia de especie

Frente a la crisis actual, han sido muchos los que han reclamado una mayor conciencia de especie para cambiar nuestra forma de habitar el planeta. La observación del espacio es la mejor lección para que los pequeños aprendan nuestro humilde lugar, y la importancia de la investigación científica.  

Un libro para celebrarloPortada de El espacio de la A a la Z Día de los asteroides

Nuestra propuesta se llama El espacio de la A a la Z, porque en ella encontrarás secretos del universo explicados de manera tan sencilla como rigurosa, con la ayuda de las atractivas ilustraciones que acompañan una aventura espacial en orden alfabético. 

  • D de Discovery

En la D encontrarás Discovery, un importante programa de misiones espaciales de la NASA, entre las cuales se encuentra el lanzamiento de la sonda espacial Dawn, que exploró Vesta, un enorme asteroide de 530 kilómetros de diámetro.

Precisamente Discovery comenzó en 1996 con la misión Near Shoemaker, dedicada a estudiar (433) Eros, el segundo mayor asteroide cercano a la tierra. Una investigación que tenía como propósito conocer más sobre el origen del sistema solar.  

¡Esto no acaba aquí! Dentro del mismo programa está previsto que a finales de 2021 la sonda espacial Lucy sea la primera en estudiar siete asteroides troyanos de Júpiter; es decir, aquellos que orbitan alrededor de este planeta.  

  • G de Gagarin

Yuri Gagarin fue un astronauta ruso -primer ser humano en viajar al espacio en 1961- que dio nombre a un asteroide situado en el mismo cinturón de asteroides donde se encuentra Vesta. 

Elegido entre 3641 aspirantes, desde entonces el espíritu de Gagarin flota en el espacio gracias a ese asteroide de unos 9 kilómetros de diámetro, que orbita sin cesar alrededor del sol.     

Y si te quedas con ganas de saber más, un complemento fantástico es Exploradores del espacio. ¿Tienes alguno en casa? ¡cuéntanos tu experiencia!

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